“La cocina del oriente michoacano tiene fortalezas muy notables. En primer lugar, resalta el uso de insumos frescos y locales, principalmente los derivados de la milpa: maíz, frijol, chile y quelites. En segundo lugar, sobresalen platillos de gran sencillez, pero con profundo significado cultural como los tamales de espiga, las corundas o los atoles, que sintetizan la esencia de la tradición culinaria”, compartió en entrevista el Mtro. Julio César Pérez Medina, docente de la Escuela de Gastronomía en UVAQ Ciudad Hidalgo.
Una de las mayores fortalezas de la gastronomía michoacana -abundó el Chef Julio- es la cocina comunitaria, donde la preparación de los alimentos se convierte en un acto de convivencia y de transmisión de saberes entre generaciones, que no solo nutren el cuerpo, también nutren el alma.
Asimismo, el Docente de Gastronomía destacó tres aspectos más de la gastronomía michoacana: primero, la tradición viva que se transmite de generación en generación a través de técnicas ancestrales; segundo, la diversidad de ingredientes que reflejan la riqueza del campo y natural del estado, desde el maíz en sus múltiples variedades hasta productos como el aguacate, la charanda, el queso Cotija, entre otros ; y tercero, el valor comunitario y ritual, pues en Michoacán muchos platillos están ligados a celebraciones religiosas, familiares y sociales, lo que los convierte en un símbolo de identidad para todos los michoacanos.
Julio César Pérez explicó que el panorama laboral en Michoacán para los egresados de Gastronomía presenta oportunidades importantes, aunque también ciertos retos.
“Actualmente existe un crecimiento del sector turístico y restaurantero, sobre todo en ciudades como Morelia, Uruapan y Pátzcuaro, lo cual abre espacios para cocineros, chefs y emprendedores gastronómicos. También hay campo de desarrollo en la docencia e investigación, pues la cocina michoacana demanda profesionales que documenten, preserven e innoven a partir de sus raíces”, comentó el Chef.
El desafío más grande de la Gastronomía es la profesionalización del sector, ya que muchos establecimientos aún se gestionan de manera empírica. Por ello, el Profesor Julio César consideró que los chefs deben prepararse no solo en técnica culinaria, sino también en administración, gestión y emprendimiento para enriquecer la grandeza de nuestro Estado.
El Chef Julio apuntó que es necesario trabajar en varios frentes para que la cocina de nuestra entidad tenga mayor presencia en otros países.
“En primer lugar, impulsar una difusión más amplia en congresos, ferias y encuentros gastronómicos. En segundo, promover una estandarización de técnicas y presentaciones que permita replicar los platillos sin perder autenticidad. En tercer lugar, formar embajadores gastronómicos, chefs y cocineros con la preparación cultural y técnica necesaria para representar a Michoacán en el extranjero”, agregó el Chef.
“Finalmente, considero esencial fomentar una innovación responsable, que permita dialogar entre la cocina tradicional y la contemporánea, manteniendo siempre el respeto a los orígenes y a las comunidades portadoras de este legado”, concluyó el Profesor de la UVAQ Ciudad Hidalgo.



